Bienvenidos a mi nuevo blog

Hola chicos, aunque voy a trabajar también con mi página web de www.elalmanegra.neositios.com voy a probar a publicar aquí los capítulos de mi historia. Gracias por visitar mi web.

QUE LA LUZ DE KIA OS ILUMINE Y LAS ALAS DE KAI OS GUARDEN :)

Lenta divinidad

Muchas veces ocurre que tan rápido como viene se va. Tantas cosas... La angustia acude presto sin que se la llame. El amor, si llega, arrastra los pies por el suelo pudiendo volar. A veces es preferible pensar en él como una efímera deidad, más que en un eterno y poderoso ser. Su madre está orgullosa de él, a pesar de haber sido víctima de sus flechas bastantes veces. En mis escasas dieciocho primaveras aparece por primera vez ante mí con sus alas blancas. No puedo verlo, mas lo siento a mi alrededor, preparado para hacerme presa de sus delirios. Saca la flecha del carcaj y apunta hacia mí el infeliz. Sin embargo, se divierte a mi costa, sabiéndome herida por su causa.  No se contenta con ello el pequeño y travieso dios: tanto me da, tanto me quita. No tiene mesura su lenta tortura. Me ve herida y no le importa; me ve llorar y le da igual. Dicen que el amor es ciego. ¡Y tan ciego! ¿No has visto,  alado carcelero, que por tu culpa estoy sufriendo? Te has llevado mi cordura y calma. Ahora me veo agitada en una tempestad continua, con sentimientos nunca antes descubiertos. Amor se mezcla con miedo; miedo se mezcla con tristeza; tristeza se mezcla con alegría. Tú hiciste que cada día mis sentimientos se volvieran más sólidos. Y cuéntame, ¿de qué ha servido? El dios que se ha ganado mi idolatría no es otro que aquel que ha robado mi corazón, aunque no creo que lo sepa...no sé si sabe cuán fuerte ha llegado a ser este sentimiento desde aquel flechazo. ¡Cien veces maldita la flecha y maldito el flechador! Ahora mis ojos sólo lo ven a él, mas no sé si sus ojos me  ven también. Mi boca amenaza con decirle tiernas palabras y mis manos con tocar las suyas.  
Ya debes saber que la razón por la que lo amo es él, siendo él mismo, sólo él. 
¡Oh, cruel chiquillo! Has hecho que sienta la muerte en vida, creyendo yo que al ser alcanzada por tus armas me prometías la felicidad.  Felicidad he tenido, no lo niego. Has agitado mi ánimo hasta el punto de que resulte difícil respirar y fácil sentir el cosquilleo de la primavera. Mi amor nunca nadie lo ha querido y tú vas y me engañas  con ilusiones y esperanzas. ¿Puedo tener esperanza? Yo así lo creo, pero por mí misma, no por ti. No necesito tu ayuda para llenar mi corazón. Mi dulce sentimiento no sabe entender las derrotas. A veces pienso que habría sido mejor que se rindiera, no ante ti, Eros, sino ante la evidencia. Qué cruel es el amor cuando no se tiene la certidumbre de ser amado. 
No te das prisa en volar...¿cómo van a alcanzar de ese modo tus flechas a mi amado? Surca los cielos con celeridad, no con desgana. Que ni tu arco ni tus manos entorpezcan la puntería. Es preciso que no te demores.

No hay comentarios:

Publicar un comentario